Se realizó un estudio en los la ciudad de Minneapolis, en el estadio de Minnesota, en los Estados Unidos para determinar si la legalización del uso recreativo de cannabis tuviera algún impacto sobre las ventas de alcohol a nivel nacional y se determinó que el uso de cannabis pudiera ser un sustituto al uso de alcohol en ciertos grupos y también se vieron resultados que indican que el uso de alcohol en algunas instancias se puede combinar con el uso de cannabis recreativo en ciertos grupos, sin embargo los resultados son inconsistentes de un estado a otro.
Las tendencias en las ventas de alcohol son inconsistentes después de la promulgación de leyes estatales con respecto a la legalización del uso de la planta de cannabis para fines lúdicos, según datos publicados en el ‘Journal of Cannabis Research’.
Un par de investigadores afiliados a la Universidad de Minnesota evaluaron las tendencias en las compras de alcohol en los estados dónde el uso de cannabis es legal (como Colorado, Oregón y Washington) en comparación con estados de grupos de control.
En dos estados – Colorado y Oregón – el consumo de alcohol disminuyó en comparación con los estados de control. En Washington, las ventas de bebidas aumentaron en comparación con los estados de control. Los resultados sugieren que el alcohol y cannabis no son claramente sustitutos ni complementos el uno del otro. El alcohol puede sustituir o complementar al uso de cannabis dependiendo de las características o las circunstancias y los subgrupos, incluidos los antecedentes de abuso de sustancias o edad.
A medida que se legaliza y está más ampliamente disponible en los Estados Unidos, existe una mayor necesidad de comprender si las consecuencias no intencionales de estos cambios de política puedan tener un impacto a los daños relacionados con el alcohol y los problemas de salud pública en general.
Numerosos estudios han tratado de resolver si es probable que el cannabis y el alcohol actúen como sustitutos o como complementos. Una revisión que se realizó en el 2020 identificó 30 estudios que encontraron que el cannabis actuó como sustituto del alcohol y 17 estudios que determinaron que las dos sustancias actúan como complementos.
Los autores del estudio identificaron un mayor apoyo a la sustitución que a la complementariedad, aunque la evidencia indica diferentes efectos en diferentes poblaciones y, hasta cierto punto, en diferentes casos de análisis.
Más recientemente, datos publicados en enero del 2021 en la revista ‘Addiction’ informan que los bebedores redujeron significativamente su consumo de alcohol durante los días que consumen cannabis.
Aún existe mucha información que se debe recabar para determinar el impacto que las ventas de cannabis tienen sobre la industria del alcohol. Todo indica que las generaciones más jóvenes prefieren el uso de cannabis sobre beber una copa, pero existen grupos que están haciendo ambas. No obstante, las ventas de alcohol se están viendo afectadas en aquellos estados de la unión americana en dónde el cannabis recreacional se ha legalizado.
Fuente: Journal of Cannabis Research